1ra Corintios 14:15 “¿Qué, pues? Oraré con el espíritu, pero oraré también con el entendimiento; cantaré con el espíritu, pero cantaré también con el entendimiento.” Uno de los tres componentes del ser, el espíritu, tiene una capacidad de la que poco se habla y que es necesario que conozcamos bien, para poder establecer la diferencia y discernir quien está hablando o con quien estamos conversando en un momento dado. A menudo, cuando oímos la voz de alguien a quien conocemos bien, con quien hemos hablado frecuentemente, ya no hace falta que estemos viendo el cuerpo de esa persona para saber quien nos está hablando. Esto ocurre cuando hablamos por teléfono, al escuchar la voz inmediatamente relacionamos lo que estamos escuchando con una persona que ya conocemos. ¿Que ocurre si no conocemos a la persona que nos habla? Que fácilmente podemos ser engañados, alguien mas se puede hacer pasar por una persona que no es. En el caso de que los tonos de voz de dos personas sean muy parecidos
Somos una Iglesia que profesa el Evangelio de Jesucristo contenido en las sagradas escrituras del cual, encomendado a los Apóstoles mediante el ministerio de la reconciliación para salvar nuestras almas. Constituida para el crecimiento espiritual y aprendizaje de las verdades bíblicas, proclamar las buenas nuevas de salvación, propiciando la reconciliación del hombre con Dios para que vivamos sobria, justa y piadosamente, a fin de presentarnos perfectos en Cristo Jesús para toda buena obra.