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Mostrando las entradas de junio, 2020

Mi socorro viene de Jehová

y tu ¿Conoces al Dios verdadero?

Juan 16:2-3. “Os expulsarán de las sinagogas; y aun viene la hora cuando cualquiera que os mate, pensará que rinde servicio a Dios. Y harán esto porque no conocen al Padre ni a mí.” El ser humano tiene la costumbre de defender su creencia cuando está convencido que ésta es la verdad, incluso con su propia vida; son capaces de llegar a morir por causa de lo que cree. ¿Qué serías capaz de hacer en defensa de tu fe, de tu creencia? El problema está cuando se sienten en el derecho u obligación de agredir e incluso matar a otro para defender o imponer su creencia. Quizá pienses que tú no matarías a nadie, pero ¿qué tan seguro estás de no hacerlo? Quizá ya lo hayas hecho. ¿Hablarías con un muerto? Estoy seguro que no; has aprendido que la persona que murió ya no vuelve a tener contacto con los vivos. Ya no reconoces a aquel que ha muerto entre los vivos, le tienes sólo en el recuerdo, pero no le hablas; aún cuando algunos en ignorancia van a cementerio a hablar con los difuntos.

Jesús dijo: Hijo de Dios soy

Juan 10:36. "¿al que el Padre santificó y envió al mundo, vosotros decís: Tú blasfemas, porque dije: Hijo de Dios soy?" El debate que se presenta aun hoy, que si Jesucristo es el hijo de Dios o si Jesucristo es Dios, no es nuevo. Esta misma interrogante se planteo estando Jesucristo en persona acá en la tierra, incluso fue motivo para que los que no pudieron entender la palabra de Dios, en boca de Jesucristo, procuraran matarle pues nunca llegaron a conocerle. Los judíos oyeron que Jesucristo dijo: hijo de Dios soy, pero no le creyeron, antes lo tomaron como una blasfemia y usaron esta expresión para condenarle. "Los judíos le respondieron: Nosotros tenemos una ley, y según nuestra ley debe morir, porque se hizo a sí mismo Hijo de Dios."   Juan 19:7. ¿Será que hoy también hay muchos con el corazón como el de aquellos judíos? “Entonces él les dijo : ¡Oh insensatos, y tardos de corazón para creer todo lo que los profetas han dicho! ¿No era necesario que

El diezmo y la libertad de hacer promesas

Génesis 28:20-22 “E hizo Jacob voto, diciendo: Si fuere Dios conmigo, y me guardare en este viaje en que voy, y me diere pan para comer y vestido para vestir, y si volviere en paz a casa de mi padre, Jehová será mi Dios. Y esta piedra que he puesto por señal, será casa de Dios; y de todo lo que me dieres, el diezmo apartaré para ti.” Aun cuando la primera referencia al diezmo que aparece en las sagradas escrituras está relacionada con Abraham, no relata   como llegó a practicarlo o como se inició Abraham en esta práctica. ¿Fue una orden de Dios? ¿Fue idea de Abraham? La Biblia no lo especifica, lo que si queda claro que, como la palabra lo dice, es un monto fijo, diez por ciento; y fue entregado a una persona que ejercía un sacerdocio, un hombre que representaba a Dios o las cosas de Dios.   Sin embargo, quiero mostrar el trasfondo en la práctica del diezmo de este otro hombre, Jacob, en este caso nieto de Abraham. Sin lugar a duda Jacob sabía o había escuchado de esta práctica.