Dios
es creacionista
“Y
vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera…”
Génesis 1:31
Dentro de su creación hay seres que tienen
características especiales. Por ejemplo, Adán y Eva, no tuvieron padre ni madre
biológica, pues no pasaron por el proceso de gestación, ellos fueron creados
por Dios, pero su descendencia, sus hijos, si tuvieron padre y madre. Sin
embargo, como creador Dios se convierte en su Padre.
“Ahora pues, Jehová, tú eres
nuestro padre; nosotros barro, y tú el que nos formaste; así que obra de tus
manos somos todos nosotros.” Isaías 64:8.
Por
eso dice en Lucas
3:38 “…Adán, hijo de Dios”.
Ahora, encontramos en la palabra de Dios esta escritura referente
a un ser creado llamado Melquisedec.
“sin
padre, sin madre, sin genealogía; que ni tiene principio de días, ni fin de
vida, sino hecho semejante al Hijo de Dios, permanece sacerdote para siempre”. Hebreos 7:3.
No que Melquisedec sea Jesucristo, sino
que en lo que se refiere al proceso de formación fue similar: “Hecho
semejante”.
Al Igual que Melquisedec, Jesucristo es
un ser creado. Al enviar Dios su
Espíritu se manifiesta el poder creador de Dios. Es por el Espíritu de Dios, que
Dios manifiesta su poder.
“Envías tu Espíritu, son
creados, Y renuevas la faz de la tierra”. Salmos 104:30.
Dios da la orden, y se manifiesta el
poder creador de Dios, por medio de su Espíritu, creando las cosas. Dios da la
orden y con su poder, por medio de su Espíritu, hace existir lo que no existía.
Y así, como la palabra al salir de la boca no se convierte en un ser aparte
sino que sigue perteneciendo al que la emitió, y teniendo aún la palabra de
Dios un privilegio mayor que la palabra nuestra como lo es que la palabra de
Dios vuelve a Dios y no vuelve vacía, de igual forma, el Espíritu de Dios es
enviado, procede de Dios, sin dejar de ser de Dios, ni convertirse en un ser
aparte.
De manera que Jesucristo fue credo por
Dios, cuando envió su Espíritu Santo sobre María y en su vientre se hizo
manifiesto el poder de Dios formando a quien sería llamado Hijo del Altísimo.
“Respondiendo el ángel, le dijo: El
Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su
sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de
Dios”. Lucas
1:35.
Al Dios engendrarle, con su poder, por
medio de su Espíritu, se convierte en su Padre, por ser su creador y por así
haberlo declarado:
“Yo publicaré el decreto; Jehová me ha
dicho: Mi hijo eres tú; Yo te engendré hoy.” Salmos 2:7.
Se necesita la presencia del Espíritu
de Dios, para que el poder de Dios obre el milagro. Por eso el Señor Jesucristo
les dijo a los discípulos:
“Pero recibiréis poder cuando haya
venido sobre vosotros el Espíritu Santo.”
Si no reciben el Espíritu Santo no se podía
manifestar el poder de Dios por medio de ellos. De igual forma, esa es la razón
por la que Jesucristo fue “bautizado con Espíritu Santo y con poder” Hechos 10:38.
“cómo Dios ungió con el Espíritu Santo
y con poder a Jesús de Nazaret, y cómo éste anduvo haciendo bienes y sanando a
todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.”
Así fue que Dios con su poder formó en
el vientre de María, después que puso sobre María de su Espíritu Santo, a Jesús
de Nazaret; y es por esta razón que el
Espíritu Santo no es el papá o padre de Jesucristo, sino que el Padre es Dios
quien le engendró con su poder. De igual manera, por esto es que tampoco tiene
Dos padres, como algunos quieren hacer ver.
Dios es creacionista, El creo lo que
vemos de lo que no se veía. Creó seres celestiales y creó al hombre del polvo
de la tierra, los formó y los hizo.
Cuando hablamos de Jesucristo nos
empeñamos en usar la palabra engendrado para hacer una diferencia donde no la
hay. Si estudiamos el origen de
Melquisedec, encontramos que él es un ser creado, hecho semejante al hijo de
Dios. ¿Fue Melquisedec engendrado? Fue
creado, fue hecho, al igual que el hijo de Dios.
“Porque este Melquisedec, rey de
Salem, sacerdote del Dios Altísimo, que salió a recibir a Abraham que volvía de
la derrota de los reyes, y le bendijo, a quien asimismo dio Abraham los diezmos
de todo; cuyo nombre significa primeramente Rey de justicia, y también Rey de
Salem, esto es, Rey de paz; sin padre, sin madre, sin genealogía; que ni tiene
principio de días, ni fin de vida, sino hecho semejante al Hijo de Dios,
permanece sacerdote para siempre”. Hebreos 7:1-3.
De igual manera, el hijo de Dios fue
creado, fue hecho. Dios hizo a
Jesucristo un tanto menor que los ángeles y lo corono de honra y gloria.
“Le has hecho poco menor que los ángeles, Y lo
coronaste de gloria y de honra”. Salmos 8:5.
, referencia claramente identificada
por el Apóstol Pablo en el libro de Hebreos capitulo 2:7-9, directamente con Jesús el
Cristo.
Dios creó, hizo a Jesucristo.
“Así también está escrito: Fue
hecho el primer hombre Adán alma viviente; el postrer Adán, espíritu
vivificante”. 1ra
de Corintios 15:45.
Note que la expresión utilizada aquí
es: “fue hecho”.
Si vemos lo descrito en Juan 1:14,
“Y aquel Verbo fue hecho carne, y
habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre),
lleno de gracia y de verdad.”
No fue por un auto proceso de
formación. No se hizo a sí mismo. Fue hecho. Alguien lo formo. Dios lo formó y
lo hizo. Dios es el creador de todo ser viviente y de todas las cosas.
“Diré al norte: Da acá; y al sur: No
detengas; trae de lejos mis hijos, y mis hijas de los confines de la tierra,
todos los llamados de mi nombre; para gloria mía los he creado, los formé y los
hice”. Isaías
43:6-7.
Dios es el creador de sus hijos, entre los
cuales está Jesús de Nazaret, el hijo unigénito del padre.
Así lo dice el Apóstol Pablo en el
libro de Hebreos, citando al salmista Davis:
“Le hiciste un poco menor que los
ángeles, Le coronaste de gloria y de honra, Y le pusiste sobre las obras de
tus manos; Todo lo sujetaste bajo sus pies. Porque en cuanto le sujetó todas las
cosas, nada dejó que no sea sujeto a él; pero todavía no vemos que todas las
cosas le sean sujetas. Pero vemos a aquel que fue hecho un poco menor que
los ángeles, a Jesús, coronado de gloria y de honra, a causa del
padecimiento de la muerte, para que por la gracia de Dios gustase la muerte por
todos”. Hebreos 2:7-9.
Note usted que no usa la palabra
engendrado, sino que usa la palabra hecho, del verbo hacer. Tiene que ver con
creación. Jesucristo es un ser creado, con un cuerpo a semejanza de carne de pecado
y su creador es el único y sabio Dios, creador del Universo, el Dios
Omnipotente.